jueves, 27 de septiembre de 2012

NEPHILA GIGANTE

    
      Científicos de Estados Unidos y de Eslovenia han descubierto una nueva especie de ‘Nephila’ gigante, una araña tejedora de seda de oro, originaria de África y Madagascar. Esta nueva especie, es la más grande conocida hasta el momento”.
    Son conocidas por ser las arañas tejedoras más grandes, y producen las telas de araña de mayor tamaño, que a menudo superan el metro de diámetro, y su seda se asemeja al oro.
    Era la noticia que había leído esta mañana, aun me daba vueltas a la cabeza cuando llegue a la escuela, en el reloj de la pared marcaba las quince treinta de la tarde, aun estaba intentando hacer mi pesada digestión, sentado frente al telar, urdiendo,( esta vez solo hilos) muy soñoliento, intentaba no bostezar, apenas podía ver entre los lizos la trama, estaba todo tan enmarañado, el suelo lleno de restos de mil batallas de ovillos y madejas, destrozos de uno y otro bando repartidos por toda la estancia. Un poco más allá las guarniciones esperaban el momento justo para atacar asomados discretamente sobre las almenas de las cestas, con sus agujas afiladas y las canillas en ristre. Se notaba la tensión del momento, sabia que todo podía empezar en cualquier momento y no quería perderme el desenlace final.
   Desde mi atalaya podía presenciar perfectamente todo el campo de combate, mi posición dominante de tejedor me hacia parecer una Nephila gigante, con su abdomen hinchado y sus ojos expectantes, atentos a cualquier movimiento de mi red y sus alrededores.
    Tímidamente vi como algunas avanzadillas se posicionaban en lugares estratégicos, cubriendo los flancos del enemigo, ya bostezaba sin timidez, apenas subía la vista para separar la urdimbre y así poder introducir mi canilla y seguir con la sarga que estaba tejiendo.
    Las tropas de este ejercito tan multicolor estaban ya dispuestas para la batalla final, eran formaciones muy estudiadas, pues a vista de pájaro parecían formas muy reconocibles por mi, como pudieran ser unos nudos marineros, incluso una formación en orden de combate se asemejaba muchísimo a un corazón, todo unido por trincheras de hilos de diferente textura y origen, aunque todos vegetales, en el interior de cada estancia de lo puestos ya habían conseguido hacer tramas muy tupidas de fino algodón y grandes manchas marcando los territorios conquistados. Estas se parecían desde lo lejos a trozos de papel artesanal. Se veía precioso, era todo tan armónico que empecé a desperezarme para poder acercarme y leer los estandartes que portaban, en ellos pude distinguir en sus insignias de guerreros frases como: “itinerarios íntimos”, “vuela libre”, singladuras, aire….
   Discretamente me acerque para comprobar que nada se había movido, todo era fruto de mi sopor e imaginación, lo que si me extraño fue un hilo que parecía muy bien atado, tire de el para sacarlo de la cesta y encontré un lindísimo libro, muy blanquito, muy limpio, era como un cuadernito de viaje finamente hilado por manos maestras, manos de mi amiga Mª Antonia Sánchez que desde Marbella me mandaba mensajes de luz, pureza y paz, mucha paz.
    Maravilloso libro sutilmente entrelazado y gran limpieza y pulcritud en su factura. Te felicito amiga por tu buen hacer y cariño con el que me lo has mandado. Espero que te guste y os guste a todos. Un fuerte abrazo.

No hay comentarios:

Publicar un comentario